PRESIÓN conTEMPERATURA

La presión es la fuerza necesaria para comprimir un determinado sistema. Puesto que el vacío no opone ninguna resistencia a ser comprimido, toda la fuerza de expansión contraria a la presión corre a cargo de las partículas que contiene el sistema. Por tanto, la presión estará en función de la referencia espacial de las partículas y de la densidad de partículas del sistema. Estas condiciones nos permitirán establecer una función directa entre magnitudes. Si retrocedemos al experimento anterior, tendremos que al espacio inicial Ei, le corresponde una presión Pi, y al espacio final Ef, le corresponde una presión Pf. Puesto que la presión es proporcional a la cantidad de referencia espacial de las partículas del sistema, la diferencia de presiones Pf – Pi, será proporcional a la diferencia de referencia espacial de las partículas, es decir, a la referencia espacial que tenían en la situación de origen más la referencia espacial excedente Ee. De tal manera que Pf – Pi = Ee. En consecuencia, podemos afirmar que la presión es directamente proporcional a la cantidad de referencia espacial excedente del sistema.

La temperatura es un concepto de efectos, concretamente de los efectos que genera la referencia espacial excedente en las partículas. Las ondas electromagnéticas se generan, por la compresión, en las capas de reacción de las partículas. La configuración regular de las partículas, por la ley del equilibrio universal y de homogeneidad, es invariable. La referencia espacial excedente producida por la compresión tiene que configurarse, por tanto, independientemente de la configuración de la partícula. Es, por decirlo de algún modo, un postizo añadido. Pero un postizo de alta velocidad, puesto que no aporta referencia temporal en absoluto. Se sitúa lógicamente en la zona de la configuración de mayor velocidad, es decir, en la capa de reacción. Aún así, resulta ser más veloz.